El Servicio de Dermatología adquiere el láser decolorante para eliminar las manchas rojas de la cara que servirá para evitar el desplazamiento de los pacientes a la península

El uso principal del láser de colorante es el tratamiento de las conocidas como manchas en vino de Oporto, que se localizan fundamentalmente en la piel de la cara del paciente por la existencia de anomalías congénitas de los vasos capilares. Gracias a la descarga de luz láser es posible quitar o reducir la mancha dejando intacta la pigmentación de la piel. El tratamiento precoz y en edad temprana, mejora de forma significativa el resultado final. Por este motivo, los niños son los que más se beneficiarán del tratamiento, aunque también se tratará a los pacientes adultos.

El láser de colorante pulsado es una tecnología que permite el tratamiento de las conocidas como “manchas en vino de Oporto”. Estas manchas de origen congénito se producen por un acumulo excesivo de vasos sanguíneos en una determinada zona de la piel. Cuando se producen en la cara pueden conllevar alteraciones psicológicas ya que suponen un importante impacto estético.

Mediante la aplicación de luz láser y gracias a su capacidad selectiva para tratar sólo los vasos sanguíneos afectados por lesiones vasculares, se consigue reducir muchas lesiones sin afectar a la piel sana y a su pigmentación original. Actualmente, el uso del láser es absolutamente seguro incluso para pacientes recién nacidos. Según estudios recientes, la efectividad en pacientes menores a un año, es significativamente superior al resto. Aún así, los efectos positivos se reflejan tanto en pacientes adultos como pediátricos y para ambos grupos estan previstas sesiones de tratamiento.

Cada tratamiento requiere de 4 a 6 sesiones de láser, y posteriormente algúna sesión recordatoria cada año. Para evitar las molestias de la luz láser, se aplica una o dos horas antes una crema anestésica que se añade al efecto anestésico del aire refrigerante que se utiliza junto al disparo del láser.

En las Islas Baleares, la adquisición del láser supondrá un beneficio para los pacientes y las familias que hasta ahora tenían que desplazarse a la península para tratarse. El año 2012 se trasladaron 86 pacientes a la península y el año 2013, 82 pacientes. Desde ahora, estos pacientes podrán recibir las sesiones de tratamiento en el Hospital Universitario Son Espases.

Ventajas para los pacientes y para los profesionales sanitarios de la Comunidad Autónoma

Los pacientes tendrán un acceso más rápido al tratamiento y probablemente se obtendrán mejores resultados, ya que las sesiones: se iniciarán con mayor precocidad y se podrá facilitar una atención más próxima en caso de producirse alguna complicación. Por otro lado, con esta inversión la Comunidad Autónoma de les Illes Balears se equipara a otras comunidades en las que ya disponen de esta tecnología. Además, se ahorrarán los costes de los desplazamientos y se conseguirá una mejor formación de los profesionales sanitarios que con esta y otras actividades se sitúa a la vanguardia de los nuevos tratamientos.